El invierno, el frío, el gusto ácido y dulce, un color anaranjado nos llevan a esta fruta: la mandarina. Todo el mundo la conoce por su alto contenido en vitamina C. Es una fruta de invierno, pero a causa de su efecto refrescante conviene no abusar, sobre todo si somos personas frioleras. Cuando comemos mandarinas hay que tomarnos la pulpa entera, es decir no solo el zumo, puesto que se aprovechan todas las propiedades que contiene la fruta, como puede ser la fibra. Se recomienda comer las mandarinas entre horas y no como postres, aun así se puede incluir en ensaladas y otros platos como pieza refrescante. Y como detalle curioso, la piel también se puede aprovechar para hacer infusiones. Nos ayudará a calentarnos en invierno y, además, es ideal para antes de ir a dormir.
Ensalada de mango,aguacate i rúcula. Muy saludable y fácil de elaborar!
Un buena época para absorber la vitamina C de forma natural a través de la “NARANJA”.
Las cerezas son una fruta que nos anuncia el verano, son antioxidantes, de las frutas que lo son más. En Cataluña hay muchas zonas donde se cultivan y donde se celebran ferias temáticas sobre esta fruta que aporta una composición nutricional con muchos beneficios para nuestra salud. La Organización Mundial de la Salud recomienda su […]